Muerte Real
- La vida depende del funcionamiento de la circulación, la respiración y el sistema nervioso que mantienen el ciclo del oxígeno. Así pues, la muerte real se produce cuando estas dejan de funcionar.
Muerte aparente
- En cambio, la muerte aparente, es un estado pasajero que en dichas funciones sólo parecen abolidas y se caracteriza por la inmovilidad y ausencia aparente de circulación y de respiración. Como sucede con la catalepsia que puede durar hasta tres días con la reducción de la respiración, la digestión y el latido, además, provoca la rigidez del cuerpo y no responde a estímulos visuales ni táctiles.
Muerte natural
- La muerte natural es cuando el fallecimiento se produce sin que intervenga una fuerza extraña al organismo. Por lo tanto, la muerte natural es la consecuencia de procesos fisiológicos o patológicos del organismo. Por ejemplo, la muerte de personas ancianas a causa del deterioro natural fisiológico de su organismo.
Muerte violenta
- La muerte violenta se produce cuando una persona fallece por causa de alguna intervención externa a la víctima. Hay tres tipos de muerte violenta:
– Homicida: muerte violenta en la que existe alguna conducta criminal por parte de alguna persona.
– Suicida: Se denomina así a la muerte violenta en la cual es la propia víctima la que decide voluntariamente poner fin a su vida.
– Accidental: muerte violenta sin implicación criminal de nadie y ocasionada en contra de los deseos de la víctima.
Muerte súbita
- La muerte súbita: Son muertes que ocurren sin antecedente de alguna enfermedad.